La información se dio a conocer a través de un comunicado que la empresa habría entregado a sus trabajadores en donde decía que a partir de este lunes estaba siendo forzada a cerrar sus operaciones y nadie estaba autorizado a producir la marca Goodyear/Kelly en el país.
La misiva también decía que habían cumplido con el pago de beneficios y deudas con los más de 1000 trabajadores de la planta ubicada en la ciudad de Valencia, aseveración que ha sido desmentida por los trabajadores quienes tempranas horas de la mañana de este lunes se mantienen en la entrada de la empresa.
Representantes de la inspectoria del trabajo han llegado al lugar para constatar la situación que se vive a esta hora en la ciudad de Valencia.
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